Aunque la mayoría de la gente ha oído hablar de los ataques de pánico, los que nunca han tenido uno tienen problemas para entender lo aterradora que es la experiencia. Tener ataques de pánico no es perjudicial en sí mismo, pero experimentar este tipo de ansiedad puede aumentar el riesgo de: Enfermedades del corazón, cáncer, dolencias estomacales, obesidad, problemas respiratorios, debilitamiento del sistema inmunológico, encogimiento de una zona concreta del cerebro, disminución de la capacidad de concentración, problemas de memoria, irritabilidad, daños en las relaciones sociales.

Ataque de ansiedad

Por lo tanto, aprender a controlar y eliminar los ataques de ansiedad es una necesidad. Un paso importante para deshacerse de los ataques de pánico es reconocer cómo y cuándo se respira en exceso. Trate de detectar cuando empiece a respirar más rápido. También debería hacerse estas preguntas: ¿Respiro demasiado rápido? ¿Respiro profundamente? ¿Bostezo por encima de los demás (el bostezo excesivo puede ser un indicio de hiperventilación)? Si empieza a respirar en exceso, es importante no reaccionar de forma exagerada ante la hiperventilación.

Cuando sienta los síntomas de la hiperventilación, recuerde que puede ser incómodo y desagradable, pero no es peligroso. Si realiza el ejercicio de respiración lenta descrito a continuación cuando empiece a respirar en exceso, los síntomas deberían remitir en uno o dos minutos.

¿Qué hacer?

Deja lo que estás haciendo y empieza a concentrarte en tu respiración. 2. Empieza a inspirar y espirar por la nariz. Hazlo gradualmente, en un ciclo de 6 minutos. Inspira durante tres segundos y espira durante tres segundos. Mientras realizas el ciclo de respiración de 6 minutos repite para ti la palabra "relax" cada vez que exhales. Es importante respirar con el diafragma, no con el pecho.

 Continúe con el ejercicio de respiración lenta antes de que desaparezcan los signos de hiperventilación. Cuando empiece a sentir los síntomas de hiperventilación, intente respirar en una bolsa de papel. Respirar en exceso reducirá realmente el dióxido de carbono en la sangre, lo que le hará sentirse peor. Respirar dentro de una bolsa de papel aumenta el dióxido de carbono en el torrente sanguíneo, por lo que debe empezar a sentirse mejor inmediatamente. Evitar lugares o situaciones que crees que pueden desencadenar un ataque de pánico puede provocar otro trastorno de ansiedad llamado agorafobia.

La agorafobia se caracteriza por el miedo a escenarios en los que la víctima percibe un entorno como peligroso o incómodo. Las personas con agorafobia suelen recluirse en "zonas seguras". Esto les hace estar confinados en casa, y a veces limitados a una habitación específica de su hogar.