¿No preferiría PREVENIR los problemas de salud en lugar de tener que lidiar con ellos? Es posible hacerlo, ¡simplemente fortaleciendo su sistema inmunológico! Aquí tienes unos cuantos consejos para que toda tu familia pueda vivir más sana y no enfermar tan a menudo.

Comer sano

Concéntrese en comer principalmente alimentos orgánicos. Encontrarás tiendas de alimentos saludables como Trader Joe's y Mother's Market que tienen alimentos orgánicos a casi el mismo precio que los alimentos "normales". Solía creer que lo orgánico simplemente no estaba dentro de mi presupuesto, ¡pero se ha demostrado que estoy equivocada! Ve a una tienda ESPECIALIZADA en alimentos orgánicos y verás que las tarifas son extremadamente competitivas.

Haz que las bayas sean una parte de tu dieta, como los arándanos, las bayas de lobo, las bayas de acai, las frambuesas, etc. Tienen un alto contenido en antioxidantes, por lo que aportan oxígeno a tus células luchando contra los radicales libres que te atacan cada día debido a todas las toxinas del cuerpo.

Ejercicio

Haz que el ejercicio forme parte de tu rutina diaria. Haz que sea una prioridad. Levántate media hora antes o saca media hora de tu día para concentrarte en tu régimen de ejercicio en lugar de quedarte encorvado en el sofá. Además, camina siempre que tengas la oportunidad: ve a los sitios a pie en lugar de coger el coche o el autobús; aparca más lejos de la entrada de la tienda; sube las escaleras en lugar de coger el ascensor. Asegúrate de dormir lo suficiente por la noche. Nuestro cuerpo necesita recuperarse del día. Durante el tiempo que dormimos, nuestros músculos crecen y nuestras células se renuevan.

Dormir es necesario.

Haga una prioridad el dormir de 7 a 8 horas por noche. Mantenga el estrés al mínimo. Intente no preocuparse por las cosas pequeñas. Tome un fantástico suplemento nutricional natural e integral, como el de Young Living Essential Oils. Utiliza productos personales que no contengan lauril sulfato de sodio, propilenglicol o algunas otras toxinas. Compruebe las etiquetas de su champú, pasta de dientes, jabón, desodorante, maquillaje, etc. Al fin y al cabo, todo lo que ponemos en nuestro cuerpo se ha impregnado en él.

Conclusión:

No necesitamos mejorar las toxinas que respiramos del entorno en el que vivimos. Utiliza productos de limpieza del hogar que no contengan toxinas. La mayoría de los detergentes, limpiadores multiusos y limpiadores de inodoros disponibles en el mercado hoy en día están llenos de productos químicos tóxicos, ¡es terrible! Basta con oler el pasillo de los productos de limpieza para darse cuenta de las toxinas que se liberan en la atmósfera. No los metáis en vuestras casas. Utilizad productos que sean seguros para vosotros.