Somos vulnerables a los virus, las bacterias, los carcinógenos, los alérgenos, las toxinas ambientales y mucho más cada día de nuestras vidas. . Estamos rodeados de miles de millones de bacterias y virus y, a pesar de ello, el cuerpo humano es extremadamente hábil para curarse a sí mismo... eso es exactamente lo que está destinado a hacer. El sistema inmunológico puede montar varias respuestas para atacar a determinados organismos invasores y, por lo general, es rentable.

Sistema inmunitario sano

Sin embargo, hay ocasiones en las que necesitamos más protección contra estos patógenos. Un sistema inmunitario sano es la mejor defensa contra estos invasores. Su dieta tiene todo que ver con un sistema inmunológico que funciona de manera óptima. Los superalimentos, al ser tan densos en nutrientes, son similares a un seguro. Los superalimentos son alimentos enteros que no han sido procesados ni refinados. Al integrar estos alimentos integrales en tu dieta, estás asegurando una salud óptima de protección.

Elegir ciertos alimentos, principalmente por seguridad, es lo mejor. Las bayas de Goji contienen unos compuestos específicos llamados polisacáridos. Los polisacáridos de las bayas de Goji poseen una estructura química similar a la del hongo maitake, conocido desde hace tiempo por su capacidad para mejorar la función inmunitaria. Las bayas son también una rica fuente de vitamina C y C. Ambas vitaminas antioxidantes son igualmente críticas en la defensa contra los patógenos. Las bayas de Goji también contienen dos importantes proteínas que favorecen una inmunidad saludable: L-arginina y L-glutamina.

Es bueno saberlo

Hay una sustancia química presente en el brócoli, denominada sulforafán, que estimula una amplia gama de actividades antioxidantes, aumentando así la función inmunitaria. Una ración de brócoli también aporta el 10 por ciento de la vitamina C y la vitamina A que consumimos a diario. El brócoli también tiene un alto contenido en vitamina C y vitamina E, que refuerzan la inmunidad. Los pescados grasos como el salmón, la caballa, las sardinas y el bacalao son conocidos por reducir la inflamación del cuerpo. Las grasas saludables son cruciales, ya que liberan el sistema inmunitario al reducir la inflamación para luchar contra estos desagradables bichos.

El pescado graso también contiene todos los minerales y vitaminas que su cuerpo necesita para mantener un sistema inmunológico saludable. El té verde tiene un alto contenido en antioxidantes vegetales -catequinas y polifenoles- que son eficaces para proteger la salud, incluido el EGCG (galato de epigalocatequina) que puede crear un sistema inmunitario fuerte. El EGCG puede ayudar a detener la replicación de virus como los del resfriado común y la gripe. Las setas se han utilizado durante siglos para la curación.

¿Lo sabías?

La investigación moderna ha descubierto por qué. Los estudios indican que los hongos aumentan la producción, la actividad y la agresividad de los glóbulos blancos que combaten las infecciones. Esto se debe a los alfa y beta glucanos inherentes a los hongos. Se ha comprobado que los betaglucanos desencadenan la producción de células inmunitarias como las células T y las células asesinas naturales (NK) que pueden luchar contra las enfermedades víricas, bacterianas e incluso el cáncer. Los hongos más potentes para la protección resistente son los hongos Shitake, Reishi y Maitake.

La calabaza está repleta de carotenoides que garantizan una función inmunitaria adecuada. El betacaroteno de la calabaza también refuerza la comunicación móvil dentro del sistema inmunitario. La calabaza también está repleta de vitamina C, que estimula las células del sistema inmunitario y de la inmunidad, como los fagocitos y los neutrófilos. Los pimientos rojos están repletos de nutrientes y tienen un alto contenido en fitoquímicos, además de betacaroteno y vitamina C, que protegen y mejoran el sistema inmunitario. Los pimientos rojos son también una de las pocas fuentes de verduras que aportan vitamina E. También son una de las pocas verduras que tienen esta potente mezcla de vitamina C y vitamina E, nutrientes cruciales para reforzar el sistema inmunitario. Las espinacas son un superalimento para la inmunidad debido a su alto contenido en vitamina C y vitamina E, junto con muchos fitoquímicos como la quercetina, que refuerzan la inmunidad.

Palabras finales

Los fitoquímicos polifenólicos, como la quercetina que está presente en las espinacas, pueden reducir considerablemente las enfermedades, potenciando así la función inmunitaria. Los tomates aplican sus poderes de inmunidad a través del licopeno y el betacaroteno que contiene. El licopeno es un potente antioxidante que protege nuestros glóbulos blancos. El betacaroteno también es potente y actúa como antioxidante que refuerza el sistema inmunitario. El betacaroteno combate los radicales libres que pueden dañar las células y las membranas celulares, protegiendo así el organismo. El yogur está cargado de probióticos (bacterias beneficiosas). Los probióticos del yogur aumentan realmente la actividad inmunitaria al "comerse" las bacterias perjudiciales. Los probióticos también crean su propio efecto antibiótico natural para proteger contra los invasores del tracto gastrointestinal.